Unas horas antes de que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont; el vicepresidente, Oriol Junqueras, y el consejero de Asuntos Exteriores, Raül Romeva, pronuncien en Madrid la conferencia Un referéndum para Catalunya. Invitación a un acuerdo democrático", se ha filtrado el contenido de la Ley de Transitoriedad Jurídica, la llamada ley de ruptura catalana, que prevé declarar la independencia inmediata.

Éstos son sus principales puntos:

Independencia inmediata
Según consta en el borrador de la ley, mantenido hasta ahora en secreto por el Gobierno catalán y al que ha tenido acceso el diario El País, la llamada ley de ruptura catalana, prevé declarar la independencia inmediata de Cataluña si el Gobierno de España impide que se celebre el referéndum separatista previsto para después del verano.

Proceso constituyente
El documento aspira a funcionar como constitución catalana durante dos meses y fija las bases del proceso constituyente para la formación de la "república parlamentaria" de Cataluña, definida como "república de derecho, democrática y social".

La pregunta del referéndum
En su disposición final, el borrador de la ley de ruptura establece la declaración unilateral de independencia si el Gobierno central impide la celebración de la consulta popular para la secesión. Se llevaría a cabo inmediatamente después de que el Parlament catalán "constate este impedimento".

Desvela asimismo, la pregunta que se realizaría en ese eventual referéndum: "¿Quiere que Cataluña sea un Estado independiente de España?", y señala que el resultado de la consulta sería vinculante, sin necesidad de un mínimo de participación ni de una mayoría cualificada para la secesión, todo ello supervisado por observadores internacionales, para el reconocimiento pleno del nuevo Estado catalán.

Nuevo ordenamiento jurídico
El borrador de la ley da por hecho que Cataluña seguirá dentro de la Unión Europea y asume sus leyes actuales y las que pudieran aprobarse posteriormente a la declaración de independencia que, en ambos casos, pasarían a formar parte del nuevo ordenamiento jurídico catalán.

Control del Govern sobre el poder judicial
Respecto a la organización de la Justicia, elimina la división de poderes y da un control absoluto al Govern catalán sobre el poder judicial, de manera que el presidente de la Generalitat nombraría al Fiscal General de Cataluña -ahora es potestad del jefe del Gobierno español y del fiscal general del Estado- y al presidente del Tribunal Supremo catalán.

Los jueces, magistrados, fiscales y letrados del Estado español, según el borrador de la ley secesionista, "podrán concursar en las plazas que se convoquen" en el hipotético estado catalán, es decir, que deberán concursar de nuevo si quieren mantener su plaza en Cataluña y el Ejecutivo catalán participaría en los procesos selectivos que fijase la futura ley.

Amnistía para condenados por sececionistas
Figura específicamente la amnistía para todos los imputados y condenados por causas secesionistas (medida que afectaría al ex presidente catalán Artur Mas, condenado a dos años de inhabilitación por la consulta independentista de 2014); la obligación a policías y jueces de solicitar la nacionalidad catalana para seguir ejerciendo, o la de que los funcionarios públicos aprendan catalán para poder trabajar, son otras disposiciones recogidas en el texto de la ley.

Derecho a la nacionalidad catalana
La ley de ruptura establece que se otorgará la nacionalidad catalana a todo aquel ciudadano español que acredite, al menos, un año de empadronamiento en algún municipio catalán o acredite un mínimo de dos años continuados de residencia en Cataluña en el pasado. En todo caso, dice, ello "no exige" renunciar al pasaporte español.

La Generalitat, titular de bienes públicos
En cuanto a los bienes públicos, la Generalitat pasaría a ser titular de "cualquier clase de derecho real" sobre todos aquellos que estén en territorio catalán y se "subrogaría" los contratos de obras y servicios formalizados por el estado y que afectan a Cataluña.



Acabaremos mal...muy mal......