El sistema permitía al conductor trabajar durante tres días registrando únicamente como recorridos 320 kilómetros desde el lugar de salida hasta que fué detenido en Francia por los gendarmes.

La sospecha de los agentes surgió al comprobar los datos del tacógrafo y comprobar que registraban que el conductor estaba descansado desde la media tarde. Ante la sospecha de una manipulación electrónica del tacógrafo, el camión fue inmovilizado y remolcado hasta un taller para su comprobación. En una primera inspección no se encontró nada, pero al abrir el tablero de instrumentos encontraron una caja electrónica sospechosa.

El sistema tenía una curiosa forma de ser activado, tal y como confesó finalmente el conductor. Se accionaba cuando el conductor pisaba dos veces el acelerador y otras dos el pedal de freno. Esto le permitía conducir mientras el tacógrafo registraba descanso.

Fué así como el conductor pudo circular viernes, sábado y domingo de forma continua desde Europa del Este hasta Sambre, registrando únicamente 320 kilómetros como distancia recorrida. El viaje del camión debía terminar en Orleans para descargar en el almacén de Amazon. La empresa estadounidense tiene contratado el transporte con una empresa polaca, pero esta subcontrata los viajes con otras empresas.

El sistema electrónico permitía además un fraude en el cuentakilómetros, ya que registraba muchos menos kilómetros de los recorridos en realidad por el camión, con lo que podía ser revendido como si hubiera recorrido menos kilómetros.

Este sistema es una novedad, ya que difiere de los que la policía localiza habitualmente, aunque cada vez son más ingeniosos, sobre todo entre las empresas de Europa del Este, hace unos meses fue localizado otro sistema que el conductor activaba con el teléfono móvil y el tacógrafo registraba descanso, siendo desactivado por el conductor en caso de control por parte de la policía.

El conductor explicó durante su declaración que ganaba entre 250 y 700 euros al mes de sueldo. Fué puesto en libertad. A la empresa le fue impuesta una multa de 6.000 euros que deberá pagar para recuperar el vehículo.

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