La historia de Osama Abdul Mohsen ha tenido un final feliz. El padre sirio, al que una periodista húngara puso la zancadilla en un vídeo que dio la vuehttp://www.elmundo.es/sociedad/2015/09/16/55f94e24ca4741f7388b4578.htmllta al mundo,llegará esta noche a Madrid, gracias a la ayuda de EL MUNDO.
Durante la entrevista con EL MUNDO, el padre sirio ya confesó lo duro de su odisea: "El viaje fue agotador y muy estresante. Muy difícil y peligroso. Mi hijo y yo pudimos morir durante el viaje a Europa".
Nada más leer sus declaraciones, la escuela de entrenadores se puso en contacto con el periodista de EL MUNDO para intentar localizar al padre y traerse a España a toda la familia. La escuela envió a Munich a Mohamed Labrouzi, un alumno marroquí que habla árabe, para ir a buscar a la familia, que ya se encuentra de camino.