Otra cosa curiosa y que habitualmente se da en la parte femenina del género Homo Sapiens.
Se trata de la peculiar forma en que muchas féminas hacen la cola en los supermercados.
Llegan. Compran cuatro cosas y miran a ver la gente que hace cola para la cajera. Si el asunto está despejado continúan con su labor sin hacer nada destacable ( salvo dar cien mil vueltas y pasar por la misma estantería un montón de veces): pero si observan que se está formando una cola, ponen su cesta con cuatro cosas detrás del último, y siguen dando vueltas para recoger lo que andan buscando. Van llenando la cesta en distintos viajes y adelantando la cesta imitando a los futbolistas ( nunca la cogen por las asas; siempre utilizan el pie para arrastrarla) Cuando la cesta ya está a la altura de la cajera terminan súbitamente su ir y venir. Miran con cara de despiste al gachó ( o la gachí) que se ubica detrás de su cesta y suelen comentar: ¡Huy! Si es que siempre se le olvidan a una la mitad de las cosas.
Lo malo es cuando algún usuario se encuentra con la abandonada cesta, la pregunta ( a la cesta) “¿Tú eres la última?”, y como la cesta no suele contestar, la aparta a un lado.
El resto ya no entra dentro de los casos curiosos; entra dentro de las crónicas de sucesos.
Un saludo.