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    • La Guardia Civil rescata a una pareja de montañeros accidentada en la faja Carriata en Ordesa (Huesca)

      La Guardia Civil rescata a una pareja de montañeros accidentada en la faja Carriata en Ordesa (Huesca)Al llegar los agentes y el personal sanitario al lugar donde se encontraban se pudo constatar del fallecimiento de uno de ellosLas labores de rescate resultaron complicadas debido a la poca visibilidad y a las fuertes rachas de viento


      La Guardia Civil rescató el pasado martes a una pareja de montañeros, resultando el hombre, de 43 años y natural de San Sebastián (Guipúzcoa), fallecido tras haber sufrido una caída de unos 50 metros de altura en la zona próxima de la “faja Carriata”, cerca de las “Clavijas de Carriata” en Ordesa (Huesca).
      Tras recibir el aviso del accidente, agentes pertenecientes a la Unidad Aérea de la Guardia Civil (UHEL) con sede en Benasque, y del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (GREIM) de la localidad oscense de Boltaña, junto con el personal sanitario se trasladaron hasta el lugar. Una vez allí, el helicóptero deja a los dos efectivos del GREIM junto con el médico en una zona por encima del herido y su compañera. Al llegar a la altura de ambos se constata que la persona que había sufrido la caída ha fallecido.

      Posteriormente, el médico junto con la compañera del fallecido se fueron en el helicóptero hasta la “Pradera de Ordesa”, quedando en el lugar del accidente los dos especialistas del GREIM junto con la persona fallecida con el fin de preparar la camilla en la que trasladaron a la víctima.

      Tras dejar a la compañera del fallecido y al médico en la pradera, el helicóptero retornó al lugar de los hechos para recoger y trasladar la camilla con el fallecido, quedando en el lugar los dos especialistas en montaña. Esta maniobra resultó muy complicada debido a la escasa visibilidad, ya que estaba anocheciendo, y a las fuertes rachas de viento.

      Posteriormente, los agentes del GREIM se dirigieron caminando con linternas frontales, puesto que no había luz natural, hasta una nueva zona que posibilitara a la aeronave su traslado hasta la helisuperficie de Boltaña (Huesca).