El ya ex alcalde de Gandia, frenado por la Policía: 'Llega el chavismo'

El ex alcalde de Gandia, el 'popular' Arturo Torró, montó este lunes en cólera cuando a su llegada al Ayuntamiento, en torno a las nueve de la mañana, se encontró con la presencia de personal del PSOE, el partido que finalmente le arrebató la vara de mando, que ahora tiene en su poder Diana Morant con el apoyo de Ciudadanos y la coalición Més Gandia, que le impedía la entrada al que "ya no es su despacho", según fuentes del equipo de gobierno, así como al personal del equipo de Torró, al que no se permitió el acceso a las dependencias que han venido ocupando los últimos cuatro años.
Torró se encaró con algunas de las personas que trataban de explicar a los trabajadores 'populares' que no podían ocupar ya su puesto de trabajo al haber cesado éste con la pérdida de la alcaldía. Asegura que les llamó "gentuza", aunque pensó cosas peores. El ya ex alcalde admitió a este diario que se vivieron momentos de tensión. Una tensión que se prolongó después al enterarse Torró de que dos agentes de la Policía Local de Gandia custodiaban la entrada a la empresa pública IPG, donde no se permitía acceder a los trabajadores. Para allá se fue el alcalde, que ante notario, hizo saber a los agentes que él sigue siendo el presidente de la empresa pública. Adjuntaba un informe de Roberto Santatecla, secretario de IPG. Tampoco pudo entrar a las instalaciones de IPG el ex alcalde, por orden de su sucesora.
La socialista Diana Morant, de hecho, ha firmado un decreto para que la Policía Local intervenga toda la documentación, sea cual sea su soporte (papel o digital) de la empresa, que se encuentra bajo la tutela del secretario municipal.
Trató de mediar en un clima irrespirable en democracia la candidata de la coalición Més Gandia, Lorena Milvaques, que calmó a Torró haciéndole ver que "las cosas no son como antes". El ex alcalde seguía a la suya con frases como que "el chavismo se ha instaurado" en el Ayuntamiento de Gandia o que estamos en un "estado bolivariano". En la línea del caos que anunciaba Torró en los debates de elmundo.es: "O votan al PP o el caos de la izquierda marxista, catalanista, laicista y extremista". El dirigente 'popular' se apoya en las declaraciones de la delegada local de CCOO, que lamenta el estado policial con el que amanecieron este lunes las dependencias públicas de Gandia y que los trabajadores de Iniciatives Públiques de Gandia (IPG) no pudieran acceder normalmente a su puesto de trabajo sin más explicaciones: "hablamos de funcionarios públicos de carrera que pueden ser trasladados, pero mediante algún decreto que desde luego no ha tenido tiempo de aprobar el nuevo ejecutivo", comentaba María Roig.
Milvaques, la cara visible de Compromís en una coalición con Esquerra Republicana y EU, aseguró estar al tanto de la decisión de la nueva alcaldesa, una apuesta por la "prudencia" para impedir que se pudiera sacar documentación "sensible" de las dependencias municipales. Y añade la candidata de Més Gandia, que a última hora alcanzó un acuerdo con el PSOE y Ciudadanos para formar parte del nuevo gobierno de la capital de la Safor, que la presencia policial, consensuada por las tres formaciones, se debe a los intentos durante el fin de semana de algunos miembros del equipo de Torró de "acceder de madrugada a la segunda planta del Ayuntamiento y la empresa pública".
Este extremo lo confirman fuentes del grupo socialista, que aseguran que ha sido la propia alcaldesa la que ha dado la orden verbal al jefe de la Policía Local de impedir a estas personas el acceso a las dependencias municipales. Añaden, además, que Torró ya no es presidente de IPG según los estatutos, por los que el presidente de IPG deja de serlo en el momento que ya no es alcalde. "En la investidura dijimos que llegábamos para levantar alfombras y abrir ventanas, y es lo que estamos haciendo", insisten fuentes socialistas, que explican que el personal eventual de Torró, buena parte del cual se desconoce si pertenece o no al funcionariado, no tiene ya nada que hacer en el ayuntamiento.
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