Hay ciertos símbolos macabros, no cabe duda. Como mínimo de pésimo gusto. Tampoco dejan muy buena idea sobre los cabales de quienes los exhiben.

Las cruces nazis y las banderas comunistas, lo son.

La bandera republicana de la segunda república, (porque la primera era la española de toda la vida, salvo por el escudo sin corona), con su franja desteñida, es simplemente anacrónica, y exhibirla como modelo, anticonstitucional, si suponemos que a la constitución le debiéramos jugar limpio todos.

Desde un punto de vista filosófico parece muy difícil poder ser a la vez y bajo el mismo aspecto rojo y republicano, ya que el rojerío que se precie de serlo, es totalitario, nada de republicano, como no sea para empezar a medrar y luego suprimir el régimen.

Lo de derechas, pero moderado, parece una excusa por anticipado. Los rojos tienen licencia de decirlo, los de derechas tienen que pedir perdón...