Precisamente el que mas raja de la Guardia Civil, es el que luego va a todos lados con la placa en la frente, el que se jubila y no es nadie y no hace mas que dar por saco en el cuarto de puertas. Tristes de la vida que se creen alguien y no se dan cuenta de quienes son.

Personalmente hace muchos años tomé una decisión, a mi no me amargaba el día nadie: ni un mando cabrón, ni un compañero llorica o amargao, ni ningún marrón en la calle. Salgo a trabajar pasándomelo lo mejor que puedo, disfrutando de las posibilidades que mi trabajo me ofrece y disfrutando de lo guapo de él ¡joder que no estamos cavando una zanja ni agachados debajo un lavabo cambiando tuberías! Trabajando a lo que la conciencia me dicta y curiosamente desde ese día, dejé de tener problemas con todos, y de llevarme problemas a casa.

A alguno lo mandaba yo , con su nivel académico, a la vida laboral civil. Iba a aprender el precio de su incompetencia (mandos por supuesto inclusive).

Pax