Una cosa es criminalizar las ideas, y otra muy diferente que hay ideas criminales. No se penaliza de estas últimas "la idea" sino el poner los medios para llevarlas a la práctica.

La idea separatista como tal no se condena, pero sin duda deben condenarse las acciones y omisiones que llevan al separatismo.

Aparte de lo anterior ¿como va a ser igual de deplorable quemar una bandera española que un trapillo regional?

Cuando los trapillos regionales se imponen en contra del conjunto, son una cosa aborrecible y nunca respetable.