Mira que me cuesta hablar de política cada día un poco menos que ayer que fue nada, y hoy a más que mañana, no por otro motivo que no sea el no perder ni un minuto de mi tiempo en escuchar o hablar de política y políticos españoles de un bando u otro, o mejor dicho, de una banda o de otra, porque así califico yo a la piorrea que se sienta en el supuestamente sagrado e inviolable Congreso de los diputados.
Hace unos años cuando yo era más joven creía que había dos maneras de hacer política, cualquiera de las dos pensadas en crear una sociedad española más justa, equitativa económica y moral porque para eso los españoles elegimos a nuestros representantes. Hoy se a ciencia cierta que todos ellos independientemente de cual sea su credo, son unos asquerosos chinches que sirven en primer lugar a sus propios intereses personales siendo el primero y principal el poder. Desde ese poder y sabiendo que cada asiento del Congreso representa para cada uno de ellos la silla regia, gobiernan de forma absolutista al ciudadano español. Si repaso la historia sagrada de mi País, compruebo como hemos pasado de una dictadura que creo un estado de bienestar a una democracia absolutista en la que ese bienestar ha desaparecido gracias a unos jodidos sinvergüenzas que han mentido millones de veces a los españoles, como hace de nuevo el señor Montoro.
Este cretino sigue empeñado en creer que los funcionarios españoles somos tontos del culo, estúpidos hasta alcanzar el vértice de una imbecilidad modelada en poco más de treinta años de democracia dictatorial ¿ como desarrollar aquí una respuesta basada en la buena educación ? sea yo consecuente con la misma y hágalo ahora mismo.

Señor Montoro. Se puede meter usted ese moscoso por el lindo y quizás maloliente agujero de su trasero. Usted, los de su partido en unión de los salientes del otro partido del gobierno han destrozado a las clases trabajadoras españolas, la baja, la media baja y la media alta. Han tapado los agujeros de la **** banca con el dinero ganado honradamente por los trabajadores españoles. Ellos . . . ustedes . . . siguen siendo más ricos cada día, nosotros más pobres y ahora trata de contentar a los funcionarios con un día moscoso más el año que viene . . . ¡ que contento me ha dejado ! quizás usted como ministro de economía no sepa que usted y los suyos, los otros antes, me han jodido casi una quincena de esos días adquiridos en treinta y dos años de servicio a España, a sus ciudadanos y mal que me duela recordarlo, a ustedes. Me han raspado -so sinvergüenza- una paga extra adquirida por y para todos los trabajadores españoles en nada más y nada menos que en plena dictadura franquista, por eso le digo yo caballero, que no nos trate como a niños destetados a los que esa pícara o pícaro fresco contenta con un chupa chups.

Váyase a la **** mierda, Montoro.