Confuso:
el 35% de los accidentes mortales se producen por descuidos en la conducción.
Afortunadamente, ya han quedado atrás los tiempos de cambiar la cinta en el cassette del coche, el pitillo en la boca, después de unos cuantos cubatas, y sin el cinturón puesto.
Mucho quejarnos cuando hay accidentes de autobuses y echarle con mucha facilidad y careciendo de cualquier prueba la culpa al conductor, pero que poco vemos nuestros propios errores.
Y encima, alguno de los "Nuestros" no le parece bien.