Hombre, puede ser que el servicio del paso del estrecho esté un poco descuidado, y seguramente que puede mejorarse, sobre todo en unas fechas en que a todos se nos cae la baba por estar con aquellos que no tenemos al lado el resto del año; pero de lo que no cabe la menor duda es que estos últimos días el asunto de viajar ha estado bastante chungo ( por no decir bastante jodido).
Creo que no estamos educados para sopesar el riesgo que supone ponernos al volante, coger un avión, o un barco cuando la naturaleza se pone alterada. Ni tan siquiera para ser conscientes del riesgo que supone el simple paseo por calles donde muchos elementos de los edificios están abandonados y pueden ser mortales en estos casos. Creo que el europeo actual cree que las infraestructuras nunca fallan y que el simple hecho de vivir en este tipo de civilización nos garantiza todo….y de eso nada.
Todos hemos visto las imágenes de aviones aterrizando este fin de semana pasado en el aeropuerto de Bilbao escorados hacía Triana. Vamos, que para “haberse matao”, y luego, si pasa algo, después de muerto la cebada al rabo y todos a protestar. Así, que sin entrar a discutir posibles deficiencias de origen económico o político, si el asunto del viaje no está totalmente seguro…pues nos jodemos y esperamos, o nos quedamos en casita echando una partida de mus y dándole al orujo cantando villancicos con la chavalería.