Sí, el último pelotazo... al contribuyente español.
Banesco (no confundir con Banesto), banco venezolano, se ha hecho con NCG (Novagalicia) en la subasta por 1.003 millones de euros. Hasta aquí deberíamos congratularnos porque el Estado recoja un dinerillo que le viene muy bien, al Estado y a los contribuyentes, pero si nos fijamos con detalle, acabamos de perder más de 8.000 millones de euros... y no incluyo los activos inmobiliarios traspasados al SAREB, más conocido por "Banco malo", valorados en más de 2.000 millones de euros.
O sea, que hemos hecho un negociazo, pues donde se han puesto entre unas cosas y otras más de 10.000 millones de euros, lo hemos vendido por 1.003 millones.
¡Ole ahí nuestros bemoles!
Pero parece que aún no ha llegado lo peor.
Según declaraciones de otras entidades presentes en la subasta, con las cifras que se manejan, no queda descartado que dentro de un breve espacio de tiempo NCG tenga que sufrir un nuevo rescate con dinero público... ese que según algún político, de cuyo nombre prefiero no acordarme, no es de nadie.
Y ahora decidme: ¿Es o no es un pelotazo?
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