Resumiendo y con palabras sencillas, un banco malo es un eufemismo muy usado en la actualidad, que simplemente viene a ser lo siguiente:
Una fórmula en que papá Estado ayuda a los bancos (empresas privadas) a deshacerse de la mierda que ellos solitos coleccionaron en su día, pagándole la misma (la mierda) con dinero público (el que aportamos entre todos), a un precio que será el que decidan entre banqueros y gobierno en largas reuniones con opíparas comidas de por medio pagadas también con dinero público, y cuya finalidad es sanear a los bancos y hacernos pagar por sus equivocaciones a las clases medias, o sea, hacer más ricos a los ricos y más desgraciados a los que ya lo somos.
En pocas palabras, comprar mierda a precio de jamón de pata negra, con dinero de los españoles, para que la banca deje de tener problemas y el resto de ciudadanos tengamos más problemas.
Crear un banco malo, es lo mismo que se ha estado diciendo por doquier y que no ha gustado a la ciudadanía, inyectar dinero público en la banca (empresas privadas), pero dicho de una manera tan suave que hasta parece que nos están haciendo un favor a los que vamos a pagar el desaguisado de unos y otros.
¡Y algunos hasta aplauden!
¡Que no nos pase "ná"!