Pues podría aconsejarte que hicieras esto o aquello...
Pero como todo en la vida, cuando uno se emperra en algo, es difícil que alguien le cambie su idea....
Para acertar, primero hay que errar. El problema es que este fallo casi nunca es subsanable, cuanto te vienes a dar cuenta de que te equivocaste de cuerpo, es tarde.
Por lo tanto, haz lo que te dicte tu conciencia y tu corazón. Solo el tiempo te dirá si erraste o no.
Como consejo:
Díjole un ministro del Emperador a Diógenes: "¡Ay, Diógenes! Si aprendieras a ser más sumiso y a adular más al emperador, no tendrías que comer tantas lentejas."
Diógenes contestó: "Si tú aprendieras a comer lentejas no tendrías que ser sumiso y adular tanto al emperador"
Quizás sea un buen resumen de lo que acabarás viendo aquí dentro.
Un saludo y buena suerte.
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