No me arrepiento, lo que no quita que me cague y maldiga las injusticias y la forma de funcionar.

Pero eso son cosas que luchando y padeciendo se arreglaran.

Hay dias que maldigo la GC, por culpa de caciques, pero me siento orgulloso de ser un GC, aun estando lejos de mi hija y mujer, cosa que quema y hace que no disfrute de un trabajo que me gusta algunos dias dificiles.