Pues algo de tomate hay detrás seguro.

De todas formas, esas aplicaciones poca utilidad aportan, aparte de permitir a borrachos eludir los controles (suponiendo que aún puedan leer en una pantalla de móvil), o escabullirse a los ladrones.

Hay gente que patalea, llora y demanda soluciones inmediatas, que trinques a los malos a toda costa y les saques de los apuros, pero cuando no te necesitan, envían mensajes para que luego escapen otros infractores o delincuentes.

De lo que no se dan cuenta es que, esos que se libran de soplar o de ser trincados (pese a ser un porcentaje pequeño) luego les vayan a matar al volante cualquier día, o les roben a ellos.

Pero bueno, de ilusiones vive el tonto de los cojones. Flaco favor se hacen. Por mi, pueden seguir avisando de todo lo que les dé la gana, y que gracias a estas aplicaciones no pille ni a un borracho ni a un ladrón más en lo que me queda de carrera profesional.

Porque queda claro que lo importante es que "mientras no me pase a mi...".

Saludos.