Sin duda, influenciado por una serie de hechos que se están desarrollando y por algunas entradas para hablar en algunos de los hilos del foro, me ha venido a la cabeza algunas cosas curiosas dignas de conocerse.
Se trata de la manipulación histórica que se hace de determinados hechos y personajes, y que desgraciadamente terminan calando en el subconsciente humano terminando como realidades.
Todos hemos admirado la estupenda película que es Braveheart. Creo que 5 Oscars se llevó y como mínimo se pasa con ella un buen rato. Lo malo son las inexactitudes históricas que en ella se dan de forma continua.
Entre otras inexactitudes curiosas está eso de poner a los escoceses como buenos, muy buenos y pobres , y a los ingleses como malos, muy malos y ricos. Inglaterra por aquél entonces no tenía nada que ver con la Inglaterra actual; y los escoceses tampoco. Hay que ver y conocer la formación de Escocia como nación para entender los conflictos que mantuvieron a lo largo de los siglos con los ingleses hasta la unión de los escoceses con los ingleses; que fue por interés escocés ( más que nada por ruina y hambre).
Otra de las curiosidades expuestas es el famoso derecho de pernada a que se ve sometido nuestro héroe. Efectivamente este “derecho” existió en el Medievo europeo; aunque no está probado su ejecución; más bien era una de las triquiñuelas políticas para que el señor cobrase un impuesto de sus protegidos. Algo parecido a lo que pasa ahora con otros nombres.
Otra es la pobreza del protagonista. Ya sabemos que los pobres siempre son buenos, y los ricos muy malos y tienen la culpa de todo; pero en este caso el señor Wallace era de origen noble; un poco tirando para abajo, pero noble.
Lo de su esposa tampoco es cierto. Marian , o Mirian, o María no fue el desencadenante de las luchas. Esta murió asesinada ciertamente pero ya en pleno conflicto y su verdadero apellido se cambió para no confundirlo con el de la novia de Robin Hood.
Tampoco es cierto que siendo niño estuviese aprendiendo latín y esas cosas. Cuando el protagonista sale fuera de la Isla es en pleno conflicto y para buscarla alianza de Francia, el Papa y otros personajes; quedando el peso de todo sobre el verdadero Braveheart que es el “malvado” Robert Bruce.
Tampoco es cierto eso de las faldas escocesas ambientadas en la época. Es como si a mis primos arévacos se les colocase la boina en pleno conflicto con Roma. La falda es posterior.
La batalla. Pues tampoco fue campal, ya que en realidad se desarrolló en un puente; el de Stirling, y la batalla real lleva el nombre de Stirling Bridge. El Puente no pudo aguantar el peso de la caballería inglesa y se derrumbó; aunque sí que es cierto, que esta victoria y la invasión posterior del terreno inglés, puso en aprieto a los ingleses ( toma de York en el norte de Inglaterra)
Los irlandeses tampoco traicionaron a los escoceses; y es más, hay que saber que el reino de Escocia estaba formado por una etnia irlandesa y otra de un conglomerado de pueblos nacidos de la lucha contra Roma. Así podemos empezar a entender de qué va eso de los clanes.
El discurso. Pues tampoco es real. Ese discurso es de una obra de Shakespeare en una de sus obras y está en boca de Enrique V de Inglaterra; pero queda cojonudo.
Las lanzas. Es cierto que los guerreros escoceses las usasen como armas en sus luchas a través del tiempo, junto con otros guerreros como los suizos, y posteriormente lo adoptasen nuestros tercios en forma de piqueros; pero no es un invento de la mente privilegiada del señor Wallace, eso ya estaba inventado en época de las falanges macedónicas.
La pintura. Eso tampoco es cierto. En aquella época el personal era bastante guarrete, y seguramente lucirían churretones que llegasen a parecer pinturas; pero es una invención sacada de sus ancestros: los Pictos.
Pero lo más curioso de todo, es la unión que hay entre todo esto y España ( ahora ya sí que os he acojonao)
En agosto de 1330, el noble escocés James Douglas, cayó junto a muchos de sus caballeros, en un combate contra los benimerines, en el asedio de la fortaleza granadina de TEBA. Con su muerte se perdió un relicario que llevaba colgado del cuello: el verdadero Braveheart perteneciente a su señor Robert the Bruce.
Ya veis como la culturilla que se ofrece al personal hay que ponerla siempre en cuarentena y no se aprende en las películas; y como se desconoce que el verdadero corazón valiente se perdió en España ayudando los caballeros escoceses al Rey Alfonso XI de Castilla. Pero no hagáis mucha propaganda de esto; porque si se entera algún historiador catalán de tendencias separatistas dirá que el corazón está enterrado en Montserrat y el verdadero nombre del protagonista es Willians Bertomeu Pujol , nacido en Martorell.