En primer lugar no tengo ni puñetera idea de lo que es eso de un lap-top: pero dadas las circunstancias y en virtud de lo descrito, lo mejor sería meterlo en una urna de cristal, ponerlo en un sitio que no le dé corrientes y dedicarse a mirarlo de “canto” para que la frecuencia foto-generativa de onda corta no lo afecte demasiado.

Y pensar que el abuelo todavía escucha la radio en una de válvulas, de las que hay que esperar un poco a que se caliente, y todavía rula como el primer día.

¿Y dice usted que cuesta….?