Es un error bastante común, extrapolar las condiciones de la Guardia Civil con las condiciones que hay en otros trabajos.
¿Comparo yo las condiciones que tiene una azafata de vuelo con las de un autónomo que tiene una tienda de barrio? Pues no, uno ejerce un trabajo, para el que se requiere unas circunstancias y una formación, y el otro ejerce otro para el que se requieren otras... y cada uno cobra lo que cobra.
Entonces, cuando comparemos a un Guardia Civil con otro componente de otro cuerpo perteneciente a las FFCCS de este país, podremos debatir. Con todos mis respetos para las cajeras y para los campesinos, yo ni soy cajero ni soy campesino, por lo tanto sus condiciones me son indiferentes a la hora de saber si soy un privilegiado o si tengo razones para quejarme.