Je, je. Si en el fondo es divertido. Solo se han dejado en el tintero un derecho democrático inalienable: que los soldados puedan llevar coleta igual que las señoras y señoritas; y que para ahorrar en camuflaje, sea obligatorio llevar tatuajes que distorsionen las líneas generales del cuerpo y causen pavor al enemigo. ¡Si es que no piensan ¡ Luego me daré un garbeo por la asamblea a proponerlo.