Je, je. El problema está en que los Reyes Magos ya hayan dejado de utilizar los tradicionales camellos. A quien se le ocurre cambiar a jorobado animal por los caballos de vapor modernos. Si es que en esta sociedad nos complicamos la vida de manera absurda y encima carecemos de sentido común.
Lo que me temo es que copien aquí, y sean capaces de multar a los Reyes y a sus acompañantes en la próxima cabalgata para los niños por no llevar el cinturón de seguridad puesto mientras desfilan por las vías madrileñas.
Espero que en su noche, esos agentes de la autoridad que aplican las leyes sin buscar el más mínimo resquicio sean castigados con carbón.