Según fuentes fidedignas y fiables, se ha llegado a un acuerdo entre el Ministerio del Interior, distintas asociaciones profesionales y El Corte Inglés para renovar parte de la uniformidad de la Guardia Civil.
Según informan, se trata de respetar al máximo las particularidades y pluralidad existente entre las distintas comunidades autonómicas españolas, adaptando determinadas prendas del uniforme a la vestimenta tradicional.
Parece ser que los cambios más radicales afectarán a la prenda de cabeza; así, de esta manera, y a modo de ejemplo, los profesionales que estén destinados en la Comunidad Andaluza se tocarán con el tradicional sombrero cordobés. Los destinados en Cataluña con la populosa barretina. Aquellos que su servicio lo cumplan en la Comunidad de Aragón lo harán con el multifuncional cachirulo. La boina se utilizará tanto en Navarra como en el País Vasco , Castilla la Mancha y Castilla León, con la únicas diferencias de la anchura del ala y la existencia o no del rabiche reglamentario. Caso particular será el de la Comunidad de Madrid, ya que en ella se da una pluralidad de orígenes que pudieran ocasionar ciertos inconvenientes; así que se ha llegado a la conclusión de que el servicio se realice “a pelo” y a quien Dios se la dé, San Pedro se la bendiga.
De todas formas, para tratar de adaptar la futura uniformidad a las particularidades estéticas de los componentes del Instituto, queda abierta la posibilidad de opinar para cambiar o matizar la susodicha uniformidad.
Caso especial es la uniformidad femenina. Dada la problemática existente, se ha optado por facilitar un vale de compra y que cada una pueda vestir a su libre albedrío para evitar males mayores.