Menos mal que soy conocedor de antemano qué aquí cuando hay hambre falta el pan, y cuando tenemos pan siempre nos falta el hambre. Qué le vamos a hacer. Pero ya sabemos lo fácil y carpetovetónico que es criticar a los demás lo que hacen… sin hacer ellos nada.
Así qué esperaremos al próximo año para que vuecencia nos provoque la sonrisa y a la vez nos alumbre con su supina sapiencia y buen hacer.
De todas formas agradecer la opinión y quedarme con lo último. Con esa sonrisa cibernética queda cumplido el objetivo; qué no era otro que una simple y pueril broma de las que no levantasen suspicacias. Y ya sabes... "No dejes que te digan que no puedes hacerlo"
Marcadores