Bueno vamos a proseguir pero muy cortito porque es la hora de mi lectura, esta noche os hablaré de un tema para mi algo TRAGICO, que ya no tiene vuelta atrás y tengo que asimilarlo, desde que nací, me crié en diversos cuarteles,me hice guardia, siempre conocí el CABALLO EN LA GUARDIA CIVIL. Lo he resaltado porque para mí es algo especial todavía que aún sigo con éllos, con sus caricias, sus paseos, en fin literatura barata.
Llegó el COS con sus LAND-ROVERS, sus TALBOT.150, ya lo hemos narrado antes, pero todavía en 1980 en muchos Puestos de la Guardia Civil había una caballeriza donde comían, dormitaban, tres o cuatro caballos que se iban dejado en letargo porque sus jinetes tenían que salir de Patrulla de COS y se encontró la Benemérita de aquellos años con una plantilla de unos 4000 caballos repartidos por todo el territorio nacional, algunos con jinete adjudicado pero sin hacer ni una sola correría montada en un año.
La respuesta de la Dirección General de la Guardia Civil del año 1982, (a cuya cabeza se encontraba el señor Roldán Ibañez), su querida, su hermano, y más elementos afines, fué ante la duda la mas dura,.
No se consultó sobre la utilidad del caballo en el ambito de la Seguridad Ciudadana a los Jefes de Comandancia, Zona o a quien fuera, No se pensó en la rehubicación de todos o partes de estos nobles brutos como un elemento más para el servicio a pesar del cariño a que se hacen acreedores, hicieron oídos sordos a aquellos Jefes que querían mantener dentro de su Unidad el mínimo indispensable de caballos para su utilización en caso necesario. NI CASO.
Hoy todavía recuerdo en el Cuartel de mi Comandancia como los guardias despedían con lágrimas a los que de verdad fueron sus compañeros de servicio, sin queja del mando, sin queja del frio, sin queja del calor, y pateaban en el patio de la comandancia caballos tan queridos para mí como GAMBO y DICAYO, cuyas fotos están colgadas con mis hijos en lugares preferentes de la vivienda. "DICAYO: el amor de su vida de mi hija SILVIA que todavía se la vé encariñada de aquel tordo rodado, noble como ninguno, y trabajador sin tregua. Lloramos la pérdida de aquellos ejemplares que por unas cuantas pesetas salían relinchando de la Puerta Principal de la Comandancia donde fueron subastados a parar a manos de tratantes de poca monta y si no le habían sacado mil duros en el cambio, POR LA TARDE AL MATADERO.
Nunca supo o quiso saber la Guardia Civil que estudiando un poco el tema si no lo hubieran hecho tan mal, a lo mejor hoy, además de nuestro querido Escuadrón de Caballería en algunos núcleos por su importancia, orografía, riqueza natural, apoyo a otras unidades, se hubiera podido seguir contando con este preciado compañero que, aunque después del servicio cotidiano le dediques como afición unos momentos de tu tiempo libre la satisfacción personal que percibe es indescriptible si no la vives, como YO. A mis 66 años cumplidos todavía tengo conmigo a mi querido POKER de 21 años, que lleva bajo el faldon de la montura el emblema del Cuerpo al que queremos.
Ha sido un placer estar unas páginas con vosotros y así hacerle la competencia un poco al gran historiador contemporáneo que tenemos en nuestras filas Miguel López Corral, vale la pena leerlo. Manolo.