Je, je. No te comas en demasía el tarro con los enigmas templarios. Hay mucho “buscateorías” en ese campo, y las cosas suelen ser mucho más sencillas.
Es un tema que engancha por el aurea de misterio que se ha creado a su alrededor, y eso da dinero.
Mide la distancia del frigorífico de tú cocina al fregrapalatos ese guarripei que siempre anda estropeado, los multiplicas por diez, lo divides por 12’5, y lo sumas a la raíz cuadrada de 32. Te asombrará el resultado.
El fin de esa gente fue bueno y positivo en un principio ( para los cristianos, claro), pero como tantas otras cosas , en cuando el dinero y las posesiones empezaron a pesar, se convirtieron en Templarios S.A.; lo que atrajo las envidias de otros. Les montaron una “moción de censura” aderezada con jueces democráticamente puestos al servicio de la corona …..y todos a la hoguera.
De todas maneras es un trozo de la historia de la Europa medieval, y merece la pena leerlo para entender mejor la Europa actual.
Un saludo.
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