Gracias. Me alegro de que te alegres. Quizás otros no se alegren tanto.
Es triste que pasen cosas de este tipo porque perjudica a la mayoría que saben hacer una virtud de su trabajo y del servicio al ciudadano. Mal asunto es que un funcionario se aproveche de su puesto para satisfacer odios y fobias personales o para buscar algún tipo de prebenda personal. Ese tipo de gentuza es peor que aquellos a los que combaten o critican. Son unos pobres diablos y susceptibles de ser despreciados.
De la señora Esperanza y de los tejemanejes políticos que se dan en estas situaciones no voy a opinar. Cada cual suele tener su propio juicio en función de muchos factores; unos acertados y otros equivocados.
Un saludo.