La Audiencia Nacional juzgará a partir del próximo 2 de julio al ex presidente de la CEOE Gerardo Díaz Ferrán y el empresario Ángel de Cabo por el vaciamiento patrimonial de Marsans, por el que la Fiscalía ha pedido 15 y 8 años de prisión para cada uno, respectivamente.
Además de ellos, la sección tercera de la Sala de lo Penal juzgará a otras nueve personas durante los días 2, 9, 10, 15, 20, 21, 22 y 23 de ese mes.
Ángel de Cabo. EFE


La Fiscalía acusa a Díaz Ferrán y a De Cabo de los delitos de alzamiento de bienes continuado, concurso fraudulento continuado, blanqueo de capitales e integración en organización criminal.
De ellos, el ex presidente de la patronal reconoció ser autor del de alzamiento, con lo que buscaba que se le aplicara una atenuante que pueda rebajar su condena.
Asimismo, el Ministerio Público ha reclamado 8 años y nueve meses de cárcel para el hijo de Díaz Ferrán, Gerardo Díaz Santamaría, y 4 años y tres meses para la "mano derecha" de De Cabo, Iván Losada.
Mientras, las otras 13 acusaciones reclaman penas para el ex dueño de Marsans y el empresario valenciano que oscilan entre los 3 años que solicita Aerolíneas Argentinas y los 31 años y tres meses que pide la administración concursal de Díaz Ferrán y la de la herencia yacente de su socio, ya fallecido, Gonzalo Pascual.
El que fuera máximo responsable de la patronal española se encuentra en prisión preventiva desde diciembre de 2012, mientras que el encargado de la operación de vaciamiento, De Cabo, salió de la cárcel en julio del año pasado tras abonar 300.000 euros de fianza por su colaboración con la Justicia.
Vaciamiento patrimonial

Según relataba el fiscal, a partir del año 2009 Díaz Ferrán y su socio comenzaron a acumular deudas "que comprometían gravemente la viabilidad" de las compañías del grupo Marsans, por lo que acreedores como Pullmantur, Sol Meliá, AC Hoteles, Hoteles Turísticos Unidos o Iberojet empezaron a exigir garantías adicionales de cobro a partir de ese año.
Díaz Ferrán y Pascual avalaron con su propio patrimonio las deudas y emitieron pagarés que no fueron sufragados, lo que derivó en reclamaciones judiciales que acabaron con las declaraciones del concurso de acreedores de la compañía y de los empresarios.
En abril de 2010 contactaron con De Cabo para que éste ocultara su patrimonio, tanto personal como empresarial, y así mantener su "altísimo nivel de vida", mediante una cesión gratuita del mismo a cambio de que, una vez realizado el ocultamiento, recibieran 8 millones en plazos mensuales de 100.000 euros, lo que les permitiría vivir "con la misma o parecida opulencia".
Para vaciar el grupo, De Cabo creó un conglomerado societario para "frustrar la recuperación de los bienes" de los acreedores y puso a miembros de la empresa en nómina, adquirió vehículos de alta gama propiedad de estas sociedades, dispuso de los inmuebles o sacó dinero de la tesorería por servicios que nunca se prestaron.
La despatrimonialización de Marsans es solo uno de los numerosos frentes judiciales que tiene el que fuera presidente de los empresarios españoles, que aguarda otro juicio junto a Losada por apropiarse de 4,4 millones de euros de clientes de Viajes Marsans.
Díaz Ferrán fue condenado por la Audiencia Nacional a dos años y dos meses de cárcel por defraudar 99,04 millones de euros del impuesto de sociedades de 2001 derivado de la compra de Aerolíneas Argentinas.
Por esta operación, el juez Fernando Andreu admitió el pasado marzo una querella de Aerolíneas contra él y el ex consejero delegado de Air Comet Antonio Mata por haberse apropiado indebidamente de 453 millones, unos 418 millones de euros.
Además, diversos Juzgado de lo Mercantil le han declarado culpable del concurso de Marsans y varias de sus filiales, como Viajes Crisol.

http://www.elmundo.es/economia/2015/...1518b4598.html