Ejemplo de mantenimiento actual.

Luminosa mañana de final de verano en una aldea perdida en las interioridades de una parte de nuestras “Españas”. Un grupo de operarios que parten de carretera general y van señalando las cicatrices y badenes que adornan la pobre carretera que se adentra en el corazón de la población. Por detrás otro grupo con un armatoste elefantiásico apisonando la capa de mejunje mezclado con gravilla que pretende ser asfalto.

¡Santos Apolonio y Ciriaco! ¡Por fin arreglan la carretera! ….exclama uno en su infantil alegría.

Curiosamente días atrás había descargado una tormenta de esas que solo se dan en los montes, y el susodicho exclamador había tenido que pelear con los charcos y acumulaciones de agua que la naturaleza había provocado, por lo cual sabía a ciencia cierta donde era necesario aplicar la capa de relleno para eliminar semejante problema.

Pues bien; resulta que observa asombrado como el gachó que va señalando con una brocha y pintura los cubículos que se deben rellenar no da una a derechas.

Encalmado y con cierta ironía se dirige al operario.


  • Buenas nos de Diós. Parece que tiene usted bien cogido el tranquillo a la faena.
  • Esto es fácil y con un simple golpe de vista se sabe donde hay que echar la capa de asfalto y gravilla.
  • Pues tiene que hablar usted con santa Lucía, porque le puedo asegurar que lo que va a pasar es que vamos a empeorar el problema.

Ante semejante atrevimiento el exclamador trata de razonar físicamente sus argumentos, pero el operario se cabrea y le remite al “encargao”.

Se le vuelven a plantear los argumentos al susodicho “encargao” y este trata de pasar la pelota a “la Comunidá”, alegando que el proyecto está muy claro y no hay fallo alguno susceptible de empeorar el problema ( evidentemente de mejorarlo tampoco)

Un par de tardes después se desata otra tormenta y el exclamador comprueba que con un poco de mala suerte tendrán que comprar una barca de segunda mano de las que venden del estanque del Retiro para paliar en parte la chapuza efectuada.

Una simple cacera hecha con la azada por el abuelo, había sido capaz de regular la caída de las aguas sin ningún problema durante años ( con guerra civil incluida); y en media hora esta tropa lo jodió todo…..y cobraron religiosamente.

Por cierto, ¿se ha dado cuenta vuestra merced de cómo vamos evolucionando en la finura del lenguaje? Je, je.