Que manía nos ha entrado aquí con compararnos con otros países. Si en Marruecos hay problemas con la religión cristiana, la solución no es hacer en España lo mismo con las religiones minoritarias. Si se supone que somos un país democrático y del "primer mundo", no nos podremos comparar con países no democráticos y del "tercer mundo".

No se puede ir de demócrata por la vida y luego ser intransigentes con los que no piensan como nosotros...