Mandar se manda solo. Tú tomas la decisión, y tú asumes las consecuencias. No puedes alegar nada de "es qu"e me han dicho...". La decisión es tuya si te equivocas. En el acierto eres uno más. Y si lo estás haciendo al contrario, eres un mando gañán.
Cuidarás de los tuyos como si fueran tus hijos. Y verás que tus "hijos" te apuñalan por la espalda. Te quemarás y te emcontrarás ABSOLUTAMENTE SOLO. Mirarás porque tu gente coma, descanse y desconecte. Y, si queda tiempo, comerás, descansarás y cerca del infarto, desconectarás en la cama de un hospital. Y serás un cabronazo...
Curiosamente, serás un cabronazo orgulloso