Los buenos instructores de diligencias se hacen enfrentándose al folio en blanco. No viene mal tener alguna guía para que no se olvide nada esencial en "casos tipicos" que suelen recogerse en las oficinas de atención al ciudadano. Pero más allá lo suyo es atreverse a escribir. Un atestado no es ni mas ni menos que el documento por el que se pone uba serie de hechos y actuaciones en conocimiento de la Autoridad Judicial.
Como dice el compañero más arriba, el tocho de Nicolas Marchal Escalona ("El Atestado. Inicio del proceso penal", creo recordar)"puede" ser una guía para ciertos casos. También está el manual que publica la Comisión Nacional de Coordinación de PJ, Criterios para la Práctica de Diligencias, o similar. Sin olvidar casos como en VIOGEN que hay una instrucción concreta con el contenido mínimo del Atestado.
Lo dicho, "a capar se aprende cortando c@j*nes", así que a escribir 😜.