Hablando de interpretaciones, la Sharia se aplica a nivel estatal en 17 países, que no son pocos. Son países tan importantes como Afganistán, Irán, Irak, Líbano, Siria o Mauritania los que nos traen imágenes de mujeres con burka, lapidaciones y ahorcamientos públicos mientras que los ricos como Emiratos Árabes Unidos, Yemen, Arabia Saudí, Omán o Qatar son acusados directamente de patrocinar guerras en los países circundantes.

En otros, afortunadamente la gran mayoría, la ley coránica sólo se aplica a nivel regional o familiar como Nigeria o Somalia y aún así sufren con frecuencia ataques de grupos radicales que tampoco saben nada de la interpretación moderada del Corán.

En mi opinión, el problema de base del Islam es que todo gira alrededor de un libro que se pensó para la guerra y la dominación. En tiempos de crisis, simplemente vuelven a la doctrina original.