La noticia sigue así...
Baja psicológica
Según la información recogida al respecto por La Voz, la mujer había estado de baja psicológica prolongada en dos ocasiones y se le había retirado el arma en ambas. Actualmente también estaba de baja médica, aunque parece ser que en esta ocasión era por otra enfermedad. En el momento en que se produjo el disparo la agente se encontraba con su mujer.
Las lesiones que presenta se cree que no le afectaron a los órganos vitales, por lo que se espera que evolucione favorablemente y pueda restablecerse.
La joven, que tiene alrededor de 35 años y es natural de Ferrol, había estado destinada en un cuartel de la provincia de Burgos y ahora ya llevaba algún tiempo en el puesto de la Guardia Civil de Fene.
Según fuentes consultadas por este periódico, la agente tenía diferencias con algunos compañeros de profesión.
Los hechos están siendo investigados por la Policía Judicial de la Guardia Civil de A Coruña, que es la que instruye las diligencias sobre lo ocurrido.
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