Objetivo: Ruta Lithium

“Pirata para toda la malla. Detenemos convoy. Iniciar procedimiento de 5-25”. La comunicación llega a cada blindado. “Recibido”, responde el cabo primero Gálvez. Dos hombres salen del vehículo y comienzan el estudio del perímetro en un radio de cinco metros alrededor del vehículo, primero, y después de veinticinco. Solo cuando se concluye esta operación se permite que la gente salga al exterior. “Antes esperaban un convoy para ir detrás, pero ahora incluso nos adelantan”, comenta Gálvez que no se atreve a dar una hora de llegada aproximada a Muqur, primera parada del convoy logístico español.

España avanza hacia el norte de Badghis por una doble ruta cuyo destino es Bala Murghab. Por un lado está la Ring Road, cuyas obras están a punto de iniciarse, el proyecto de carretera circular que unirá todo Afganistán “en un futuro lejano”, según los mandos. Por otro, la ruta Lithium que “en un futuro próximo, esperamos que antes de 2014, esté abierta al tráfico, es nuestro compromiso más importante”, informa el coronel Demetrio Muñoz, responsable de las tropas españolas desplegadas en Badghis. Los primeros 27 kilómetros hasta Muqur discurren por una pista graveada –la Agencia Española de Cooperación Internacional y Desarrollo (AECID) ha destinado tres milones de euros al proyecto- “lo que nos ha ayudado mucho a combatir los artefactos explosivos improvisados, cada vez que intentan hacer un agujero es muy visible porque el piso es más o menos firme”, informa el capitán Víctor Mariño, responsable de la unidad de desactivación. Los insurgentes lo saben y por ello ahora intentan hacer daño mediante artefactos activados a control remoto, escondidos en garrafas o en motos que dejan en las orillas de la ruta.

En el interior del RG31, el vehículo de combate que sustituye al antiguo BMR, cuesta moverse. Con chalecos, cascos, munición… cada hombre lleva encima más de veinte kilos de equipo. Entre bote y bote se habla de cine, fútbol y hasta del corazón. “¿Habéis visto la película de ‘La bestia’? La del tanque soviético que se pierde por Afganistán…” Un título que no convence demasiado al personal que apuesta por “Rambo, esa sí que una buena película bélica, especialmente la primera. Allí se ve el amor de un soldado por su unidad”. Opinión compartida antes de saltar a otros títulos como ‘Black Hawk derribado’, ‘Apocalipse Now’ o ‘Salvar al soldado Ryan’. En Afganistán no importa la distancia en kilómetros ya que, en función del clima o de las paradas por motivos de seguridad, se pueden tardar horas o días en llegar de un lugar a otro. “Cuando uno sale de la puerta de la base no sabe cuándo regresará, por eso hay que ir preparado para todo y eso que las comunicaciones han mejorado muchísimo”, señala el capitán Armada, responsable del convoy. Esa preparación supone un trabajo previo minucioso de inteligencia repasando los lugares más calientes y la confección de una columna con ambulancia, equipo de comunicaciones y posibilidad de apoyo aéreo para evacuar heridos en caso de sufrir un ataque. “Si no hay aeroevacuación, no hay convoy. No se corre el mínimo riesgo innecesario”, apunta el coronel Demetrio.

Los cristales se llenan rápidamente de polvo. El paisaje que ven los ocupantes está filtrado por una capa gris que convierte la ruta en una especie de paseo espacial. Los tiradores manejan sus ametralladoras del calibre 12,70 desde el interior y con un joystick, como si fuera un videojuego. El enemigo puede ser cualquiera de las personas que asoma en las lomas del valle o adelantan a los vehículos con sus motos. La diferencia tecnológica entre rivales es enorme, “pero ellos conocen muy bien el terreno y cuentan con el factor sorpresa”, recuerda el capitán Armada.

Circular por la Lithium es circular por la mayor apuesta de España en Afganistán en su guerra por lograr llevar el nombre del gobierno de Kabul a “lugares donde nunca antes se había llegado. Esto molesta a los insurgentes que hasta nuestra llegada eran dueños y señores. Pero no vamos a detenernos y seguiremos avanzando para establecer puestos de observación y bases de combate desde las que pueda trabajar el Ejército afgano en el futuro próximo”, apunta el coronel.

Ford Ricketts se distingue en el horizonte. El antiguo fuerte británico acaba de ser abandonado por los americanos y España lo reforzará con la llegada de los hombres que hasta ahora desempeñaban su labor en el valle de Darrah i Bum..



El reportaje de Antena 3 ‘Los nuestros’, con imágenes de soldados españoles abriendo fuego en Afganistán, ha encendido todas las alarmas en el Ministerio de Defensa. La filtración ha desembocado en una orden inmediata: ningún militar saldrá a patrullar con teléfono móvil o cámara de fotografías, bajo amenaza de sanción.
Tienen prohibido grabar, pero aún así los mandos intermedios suelen hacer la ‘vista gorda’. A veces lo hacen incluso con su complicidad. Cuando los soldados españoles salen a patrullar por la peligrosa ruta Lithium de Afganistán –la que cubre el área no construida de la carretera ‘Ring Road’-, muchos van acompañados de dispositivos de captura fotográfica, como móviles o cámaras digitales.

Esas fotografías y vídeos, que en un principio quedan reservadas para uso propio o como meros ‘recuerdos’ de su misión en la zona de operaciones, corren el peligro de filtrarse a la opinión pública. Como ha pasado esta vez. Antena 3 emitió el pasado lunes decenas de vídeos obtenidos directamente de los soldados durante sus patrullas por Afganistán.

Por esta vez el daño “ya está hecho” aseguran fuentes militares consultadas por El Confidencial Digital, pero Defensa quiere cortar por lo sano. A partir de ahora, ningún militar podrá portar móviles o cámaras durante las patrullas, a no ser que cuente con un permiso expreso de sus superiores de la base.

Tal y como confiesanaECD las fuentes consultadas, en caso de incumplimiento de esta instrucción operativa se dará paso a la apertura de un proceso sancionador, que puede incluso derivar en una expulsión del ejército.

La orden, que algunas fuentes consultadas atribuyen a Defensa y otras a la Jefatura del Estado Mayor de la Defensa, es de aplicación “inmediata” y ya ha sido transmitida a los mandos españoles desplegados para la misión en Afganistán.

Apertura de expedientes

Cuando Defensa conoció la existencia de estos vídeos y su inminente emisión en Antena 3, el Ejército de Tierra encargó a su Centro de Seguridad (CESEGET) que comenzase a estudiar las imágenes.

El objetivo, tal y como adelantó ayer El Confidencial Digital, era identificar a todos cuantos salen en esos vídeos para valorar su conducta o sus declaraciones y proceder a la apertura de un expediente disciplinario a cuantos militares se considere oportuno.

Según confiesan fuentes militares, han sido dos las escenas que más han molestado en Defensa:

-- En uno de los vídeos se ve al jefe de una patrulla comenta en tono jocoso las escasas medidas de seguridad del convoy, parado después de que un vehículo quedara atrapado en el terreno. Los soldados de los otros vehículos descansan sin protección, sin cascos, y sin tener las armas en disposición de tiro en caso de ataque. Ni rastro siquiera del perímetro de protección obligatorio en estos casos.

--En otro, tomado de noche durante una escaramuza con la insurgencia escondida en las montañas, puede escucharse a un mando criticando la decisión del jefe de la base a la que pertenecen de enviarles “con un VAMTAC” a patrullar, un vehículo que no aporta demasiadas garantías de seguridad para la misión afgana. Su amarga queja finaliza con una dura crítica: “verás tú como si hubiera venido él venía en un RG-31”.

Pinche aquí si quiere ver el reportaje completo ‘Los nuestros’.


Una bomba de al menos 20 kilos de explosivo mata a una soldado y un sargento del regimiento 9 con base en Fuerteventura en una misión en Afganistán
http://www.eldigitaldecanarias.net/imprimir50676.php

http://elconfidencialdigital.com/def...c-9ef828731189



Para saber un poco más de la zona.


:mariguano:-)