Ni quemarlos en la plaza pública junto a sus jueces, ni hacerlos héroes incomprendidos...
Este señor alude para su defensa, al voto particular frente a las opinadoras como Elisa Beni y compañía. Pero no olvidemos la sentencia, aún no firme, pero emitida por señores que tampoco son Elisas Benis. Atendiendo a la misma lógica en la que este personaje esgrime el criterio del voto particular, habrá que decir que se sostiene (de momento) que dicho ser es un abusador.
No veo admisible que venga ahora de víctima y que se ponga digno. Me parece vomitivo. Semejante cucaracha que dejó tirada a una chavala a más de 400km de su casa, sin el teléfono y borracha, que no venga de víctima, que vomito aquí mismo.
No señores. No puedo admitir que las feminazis condicionen las sentencias. Ni que se hagan linchamientos. Pero tampoco admito a las cucarachas como mis referentes morales. Hasta ahí podíamos llegar...
Marcadores