Con permiso. A pesar de que esta parte del foro es particularmente profesional, quiero que se me permita opinar sobre algo que es de dominio público e interesa a todos.

Parto de la premisa de que siento asco y vergüenza ante la existencia de este tipo de sujetos que no son capaces de respetar a nadie, y encima se amparan en la actuación colectiva para cometer sus actos delictivos y despreciables. Simplemente por esta actitud ya son susceptibles de ser calificados como delincuentes y animales irracionales; pero, personalmente, y por tanto aceptando de antemano que puedo equivocarme, hay determinadas circunstancias que rodean este caso con las que discrepo radicalmente de lo que se cuece entre la generalidad de la sociedad.

En primer lugar no puedo emitir ningún juicio mínimamente serio ni honrado si desconozco las particularidades del caso. Bien sabéis vosotros que dentro de los actos delictivos hay que tener en cuenta muchas circunstancias que a la postre pueden variar los grados de incriminación y de responsabilidad. Tantas circunstancias razonables se pueden dar que incluso lo que para el españolito de infantería es, por ejemplo, un robo, resulta que para la justicia es un hurto, y luego resulta que, con el mismo resultado para la víctima, la responsabilidad y el castigo no es el mismo para el delincuente. Por lo tanto tengo que admitir y suponer que, la actuación y el fallo que emiten tres jueces, tiene que ser honrado y adecuado a las evidencias e investigaciones que se han realizado. Luego, y dentro de mi manera de entender y “juzgar” los hechos en función de lo poquísimo que sé sobre ellos, podré estar de acuerdo o pensar lo que me dicte mi particular sentido común y raciocinio.

Soy de los que consideran que la independencia judicial es imprescindible para vivir en una sociedad mínimamente basada en la justicia, aunque estoy totalmente en contra de que existan ideologías oficiales dentro del mundo jurídico, ideologías colegiadas que determinan las diferenciaciones que se dan en las interpretaciones sobre los mismos hechos en función de quien y como sea la ideología del juez de turno. El día que esto último se supere habremos dado un paso de gigantes en la justicia.

En este caso en particular advierto cosas y circunstancias que no me gustan ni apruebo. En primer lugar el juicio mediático que desde el primer momento han hecho uno de los colectivos que más ayudan a enmarañar y manipular a la opinión pública: la prensa y los medios de comunicación.

Observo con inquietud, como distintos grupos sociales se aprovechan del control que ejercen sobre determinados medios de comunicación para ir creando el sustrato adecuado para el beneficio de sus intereses., y lo peor, que a través de este movimiento pastoril, se mueven muchos borregos y una buena parte de inocentes corderitos.

Otro aspecto que me inquieta, es la enorme hipocresía que demuestra nuestra sociedad, movilizándose por hechos determinados y callando vergonzosamente cuando no interesa o cuando no se agita adecuadamente el avispero por los poderes mediáticos. No somos honrados con nosotros mismos; así que de serlo con lo ajeno…

También me preocupa el observar cómo la porquería política se aprovecha y manipula este tipo de hechos para tratar de arrimar el ascua a su sardina; pero de la clase política ya no me extraña absolutamente nada.

Ahora se exige que se cambie la legislación, que se hagan distinciones penales en función del sexo de quienes delincan, el “todos somos iguales ante la ley” se matiza y se propone ( de hecho ya es así) que el sexo determine ciertas diferenciaciones penales . De hecho no comparto esta diferenciación. Puedo estar equivocado, pero si quiero ser honrado conmigo mismo, tengo que partir de la base de que hombres y mujeres somos iguales ante la ley. No puedo entender eso de “discriminaciones positivas”. Si son discriminaciones siempre terminaran siendo “negativas”, y además, creo que no solucionan nada; al contrario, crean más problemas y distancian más a hombres y mujeres.

Por último quiero opinar sobre lo que considero el verdadero problema y sobre el que nadie quiere hablar. Me refiero a recapacitar sobre qué circunstancias hacen que cada vez exista más violencia sexual.

Para mí hay dos circunstancias que inciden, cada vez más, en que la violencia sexual aumente y se llegue a instalar en nuestra sociedad. La primera circunstancia es el tipo de educación que se da a nuestros jóvenes desde hace ya algunos años. Aquellos niños que comenzaron a sufrir el giro en la educación son ahora los monstruos que ven con normalidad la serie de aberraciones que de forma continua se cometen. Consecuentemente del tipo de educación recibida se asimila una determinada cultura ( en general casi inexistente) y además una cultura mediatizada y encauzada para obtener determinados fines sociales. Mientras se mantenga este sistema ( aquí entra en juego el verdadero sentimiento “antisistema”) no podremos eliminar muchos de los problemas que nos atenazan . Hace falta dar la vuelta al calcetín y cambiar la educación de nuestros muchachos. No hace falta legislar. El cambio de leyes no atajan los problemas de raíz, y está más que comprobado que el aumento de penas, puede ser complementario, pero no soluciona de raíz los problemas. Aplicamos más dosis de antibiótico, pero no atajamos la causa que produce la infección.

Y la otra circunstancia, que es consecuencia de la primera, es el tipo de “escaparate social” que se ofrece a los ojos, no solo de nuestros jóvenes, sino a la de todos nosotros. Basta mirar con un poco de atención a nuestro alrededor para darse cuenta de lo que hablo. El concepto de libertad no se sabe asimilar. El concepto de derecho se asimila con el clásico yo, mí, me, conmigo; nunca se piensa en los derechos del resto ni se quiere saber nada de las obligaciones que lleva implícito el concepto de derecho.

Si juntamos estas circunstancias se llega a resultados de todo tipo que están incidiendo negativamente en nuestra sociedad, y entre esos resultados está este tipo de delitos que ahora tanto escandaliza y tanto se manipula.

Podría escribir muchísimo más sobre el tema, pero no quiero aburrir al personal. Con esto creo que queda medianamente clara mi opinión.