Mi experiencia profesional en casos de mujeres que durante años han sido objeto de todo tipo de abusos y agresiones fisicas y morales, es que llega un momento en que dejan de ser personas con capacidad de decisión, quedan anuladas por sus agresores.

Llega un momento en que algo cambia, apoyo social, medico, policial y sale todo lo pasado a la luz y son los relatos mas crueles y salvajes que un Guardia Civil pueda escuchar.

Pasar de no dar crédito al porque no ha denunciado a entenderlo y saber que has ayudado a una victima.

Por eso digo que si los compañeros de la victima han visto algo que lo declaren que dejen el miedo a un lado y lo mismo si hay testigos de la parte acusada que declaren libres.

Al final no esta en juego lo que haya sucedido entre dos personas, esta en juego un modelo de sociedad que no combate los abusos y la violencia.