Este tipo, ya se dio a conocer por estos lares cuando era delegado del gobierno. De aquella, la autopista no llegaba a Ferrol y llamaba a una patrulla para que le abriera paso hasta su casa, claro, pobrecito no puede estar como los demás, en la retención.
Y un sin fin de historias más. Aquí dejó grato recuerdo. Bueno, algún jefe ahora si que esta contento, pezado de ascenso ha tenido en su carrera militar. Los años de lamer nalgas le valieron para algo.