Por desgracia el sistema no parece hecho para que los mas validos sean los que lleguen arriba, si no los que esten dispuestos a pagar un alto peaje en su vida, tanto laboral como profesional. El hecho de que un ascenso implique el cambio de destino y/o de especialidad, hace que mucha gente se lo piense dos veces antes de intentar subir. Por contra aquel que esta mal va a por todas porque cree que no puede estar peor y que esa puede ser la manera de mejorar ya sea viviendo en un sitio mejor o desempañando unas funciones que le hagan sentir mas realizado. Hay una cantidad de guardias y suboficiales con gran preparacion en idiomas, estudios superiores o estudios especificos de cualquier clase, de los que se desaprovecha ese potencial porque se niega a ascender o hacer una especialidad para emperorar, no pudiendo aportar esos conocimientos y experiencias en pro de la guardia civil y de la sociedad.