El cuento del Señor que le faltaba el dedo meñique

Érase una vez un señor que se llamaba España que le faltaba solo la mitad del dedo meñique, el buen señor estaba buscando trabajo y además estaba muy preparado porque tenía sus estudios universitarios y también tenía experiencia laboral y era muy muy inteligente y vio un anuncio en un periódico de una empresa que se llamaba Señora Merkel, así que España, tras leer los requisitos, se dio cuenta que reúnia todas las cualidades para el puesto, parecía que lo estaban describiendo a él.

Total que fue a la entrevista y él era el único candidato:

España: Hola buenas Señora Merkel vengo a por este puesto que ustedes ofrecen en su empresa.
Señora Merkel: Humm, veo veo veo, en fin parece que usted reúne todos los requisitos.
España: cierto señora Merkel, soy muy trabajador, muy inteligente, hablo cinco idiomas..
Señora Merkel: Si pero a usted le falta el dedo meñique.
España: bueno pero no me falta entero, y además eso no tiene nada que ver con el puesto, es un puesto en el que se usa la cabeza.
Señora Merkel: Si pero le falta el dedo meñique.
España: bueno pero entrego siempre todos los trabajos a tiempo.
Señora Merkel: si pero le falta el dedo meñique.
España: bueno señora pero es no tienen mejor candidato que yo.
Señora Merkel: si pero le falta el dedo meñique.
España: soy muy obediente.
Señora Merkel: si pero le falta el dedo meñique.

moraleja si la señora Merkel no confía en España porque no le da la gana (o no le conviene) España seguirá jo—da, aunque suba el iva, despida a todos los funcionarios y nos estén dando porcu..in eternamente.