Todos los demócratas están en contra de todas las dictaduras sean de derechas o de izquierdas. Ningún demócrata de verdad apoya a corea del norte o al régimen de castro. Los regímenes totalitarios son contrarios a los principios de la democracia y por eso no se entiende que haya sectores que defiendan al golpe de estado del 36 y a franco.