Ese debe ser el "justiprecio" que le dan a una vida del "vulgar populacho". No hace mucho salió condenado un tiparraco que la mañana de un domingo, conduciendo borracho tras una noche de sábado desenfrenada, atropelló y mató a dos ciclistas, dos padres de hijos pequeños, dos personas decentes, trabajadores, de esos que tienen un día a la semana para poder arañar a una vida de compromiso, de dedicación a los suyos y los demás, unos minutos para sí mismos. Dos años y medio ha sido el total de la condena, lo que significa que en el increíble caso de que llegara a cumplirla completa, deja la cosa en un año y cuarto por cabeza. Pero es evidente que saldrá mucho antes del trullo, lo que tal vez con la rebaja y siendo irrisoriamente cándida, me da que puede quedar a tres cuartos de año la vida.

En el caso de esta asesina, tal vez por todos los agravantes de hacer lo que hizo y como lo hizo, han estirado la condena hasta un año por vida.

Tal vez esté la justicia de saldo por liquidación del negocio.