Toda empresa pública del Estado español, y digo "TODA", basa su existencia en un "DOGMA"; ideales, objetivos, servicio público en general,
¿Qué sucede después?, sucede que cuando se empieza a manejar el dinerito la perspectiva cambia y lo que era un dogma inicial (servicio al público), se convierte
en un negocio del que todos quieren coger cacho.
Es una corrupción irrefrenable porque quienes deben exigir responsabilidades son los primeros corruptos e interesados en encubrirlo.
Siempre podrán decir que no es un afán recaudatorio sino sancionador con el solo objeto de evitación de accidentes etc.....
¿Como pueden hacerse las cosas bien sin perder el horizonte del dogma?; la única forma es que quien dirige el país sea honrado, cumpla en primer extremo
y así poder exigirle a los demás en la misma medida, pero por desgracia, cada día observamos atónitos que todos los políticos centran su labor en un
solo objetivo, "El enriquecimiento personal". :salu:
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