Me he puesto a escribirlo como me enseñaron en la escuela. Junto la B con la R, luego le añado la U, después pongo la J y al final la A…y siempre me sale lo mismo: BRUJA. Por más que lo intento nunca me sale “futurólogo a lo cutre”. No entiendo en qué me puedo estar confundiendo para poner una definición y salirme otra cosa distinta.

Luego, por si las moscas, me he puesto a revisar la prensa y esas cosas, y resulta que debe estar llena de “brujas y brujos”… porque todos vienen a decir lo mismo.

En fin, que deben ser los efluvios etílicos tabernarios. A partir de hoy ya no me limitaré a pasar por delante de la taberna; ahora siempre cambiaré de acera por si acaso; y ya no leeré más la prensa. Ahora solo leeré el cuento de Caperucita, ya que por lo menos en ese cuento todos se ponen de acuerdo para matar al lobo.

¡Jesús que cosas pasan en esta democracia!