Es algo que no nos debe extrañar. Si detienes a un pequeño traficante de drogas te dice que por qué no detenemos a los gordos, si uno da positivo en alcoholemia te dice que con la de chorizos que vagan por ahí y vamos siempre a los currantes por tomarse dos vinos, y en este caso si una prueba de ortografía la pasan más de 4.200 opositores pues te buscas otra excusa. Todo vale con tal de no reconocer la culpa y considerarse perfectos. No debemos extrañarnos, es lo habitual en la vida en general.
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