Esta mañana he recibido la noticia por correo electrónico y no daba crédito a lo que mis ojos veían.
Esta niña de papá, aparte de la licenciatura en Derecho que hasta puede que también se la hayan regalado, no ha hecho en su vida nada más que estar bajo la sombra de papá. Eso sí, en buenos puestos de Telefónica, con buenos sueldos y poquito trabajo.
Su marido fue Consejero de Sanidad en el gobierno de Esperanza Aguirre.
Su padre, Carlos Fabra, presidente de la Diputación de Castellón de 1995 a 2011, imputado judicialmente por delitos como el tráfico de influencias, cohecho o evasión fiscal (premiado en la lotería hasta en nueve ocasiones), también es famoso por ser el principal impulsor de la creación del aeropuerto de Castellón, del que aún no ha despegado ni aterrizado ningún avión y que costó más de 150 millones de euros. Dicho aeropuerto alberga una estatua suya de 25 metros de altura y que costó cerca de 300.000 euros a las arcas públicas.
Más detalles haciendo clic aquí.
Marcadores