Hay un documental buenísimo que creo recordar se llama Teoría del shock. En él se habla de cómo el ser humano es mucho más dócil cuando se encuentra bajo ese estado. Ahora mismo a los ciudadanos nos tienen en un estado constante de shock. Todo son malas noticias. Tras habernos inoculado en el cerebro ese estado constante de alerta, nos recortan derechos y nos emprobecen.
Mientras tanto ellos, los únicos verdaderamente privilegiados, siguen viviendo a cuerpo de rey, colocando a los suyos en altos cargos de la administración y de grandes empresas, y teniendo jubilaciones doradas.
Marcadores