La Policía se incauta de tres toneladas de cocaína en un barco a 50 millas de Cádiz

Los GEOS asaltaron el buque, que se dirigía a Galicia, en alta mar · Hay 31 detenidos entre los tripulantes búlgaros de la nave, los gallegos que tenían que recibir el alijo y el clan colombiano que lo gestionaba
Melchor Mateo / Cádiz / M.M.A. / Cádiz | Actualizado 16.08.2012 - 06:54
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Parte del alijo que transportaba el mercante, ya depositado en la mañana de ayer en el muelle de Poniente del puerto de Cádiz. /Julio González
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"Queremos evitar que España sea utilizada como puerta de entrada a Europa de la droga"


"Un duro golpe" al narcotráfico internacional. Así calificó el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, ayer en el Muelle de Poniente de la Zona Franca la operación llevada a cabo contra una organización dedicada al tráfico de drogas que se ha saldado con 31 detenidos y la incautación de tres toneladas de cocaína de gran pureza que eran transportadas en un barco mercante y que fue interceptado por los GEOS en la madrugada del martes a 50 millas de la costa gaditana. El barco fue trasladado a la Zona Franca gaditana donde ayer se procedió al desembarco de la droga y a la puesta a disposición judicial de la tripulación, formada por 21 personas de nacionalidad búlgara. Este es el mayor alijo de cocaína incautado en España en lo que va de año.

Según explicaron el propio Cosidó y el comisario jefe de la Udyco (Unidad contra la Delincuencia y el Crimen Organizado), Eloy Quirós, que es el grupo que ha coordinado la investigación, el barco llamado SV. Nicolay, fue cargado en alta mar en algún punto del caribe, fuera de las aguas juridisccionales para ser transportado hasta Galicia.

Y es que la Operación Espartana permitió también averiguar la estructura de la organización criminal. Por un lado estaba la rama colombiana, que gestionaba desde Madrid los pormenores de la operación, aunque desplazaron a uno de sus miembros a Galicia. De esta rama han sido detenidas seis personas.

Los colombianos estaban en contacto con un grupo de transportistas gallegos cuyo cometido era recoger y alijar la cocaína que traían los ciudadanos búlgaros a la Costa de la Muerte y posteriormente entregarlas a los colombianos que la distribuirían por España y por otros países. La operación en Galicia se ha saldado con otros cuatro detenidos.

También se averiguó que el medio de transporte elegido para traer la droga hacia España era un buque de 130 metros de eslora y 25 de manga que estaba atracado en África. Precisamente, éste fue enviado el mes pasado a Suramérica para recoger la droga que ahora se ha incautado.

La operación no está cerrada aún y a los 31 detenidos se le pueden unir otros en las próximas horas. De hecho la policía búlgara puede llevar a cabo nuevos arrestos vinculados con este caso y en España también se puede ampliar el número.

El barco fue abordado de noche por los GEOS cuya tripulación no pudo percatarse de la presencia de los policías hasta que no los tenían a bordo. Uno de los miembros de este grupo de élite señaló ayer que el abordaje se veía dificultado por la noche, las dimensiones del barco y porque las condiciones de la mar siempre son difíciles en el punto en el que se llevó a cabo la operación, concretamente en la línea de tráfico del Estrecho.

Una vez que subieron, pudieron hacerse con el control de la nave y detener a todos los tripulantes, que aunque no portaban armas, alguno sí que ofreció alguna resistencia. A pesar de ello, la operación fue limpia y no hubo ningún herido.

Espartana ha sido fruto de la "magnífica" colaboración que se ha producido entre las unidades territoriales y centrales del Cuerpo Nacional de Policía y también de la Armada y de la colaboración internacional, ya que en el operativo también colaboró un avión de la Guardia de Finanzas de Italia, que fue el que localizó y dio el punto exacto en el que se encontraba el barco. Por su parte, la Armada fue el que transportó a los GEOS hasta el mismo buque que transportaba la cocaína.

Esta iba en un habitáculo de las maromas situado en la proa del barco. La cocaína iba alijada en fardos con un peso que oscilaba entre los 25 y los 35 kilos cada uno y estaba ya preparada para ser desembarcada a través de una trampilla situada en la parte superior con una grúa. Curiosamente, llevaban otros fardos llenos de botellas de agua que servirían de boya flotante en el caso de que cayera algún fardo al agua en el desembarco.

A lo largo de la jornada de ayer se procedió al desembarque y pesaje definitivo de la droga y se iba a proceder a un registro exhaustivo del barco. El SV. Nikolay viajaba sin ningún tipo de tapadera, es decir, el único cargamento que llevaba era el de la droga .

Mientras tanto, la tripulación búlgara iba a pasar a disposición del juez instructor de Cádiz y posteriormente ante la Audiencia Nacional.

El director general de la Policía, Ignacio Cosidó, señaló ayer en el Muelle de Poniente de la Zona Franca de Cádiz, que operaciones como ésta y otras que se han llevado a cabo en los últimos días demuestran que "vamos por el buen camino" en el objetivo "muy claro" que tiene el Gobierno de "impedir que España sea utilizada por las redes del narcotráfico internacional como una puerta de entrada en Europa".

Para Cosidó el narcotráfico " sigue siendo la principal industria del crimen organizado internacional" y estas operaciones "son una ofensiva muy importante del Estado español en la lucha contra esta plaga".

El director general de la Policía destacó que en diez días se han incautado en tres operaciones diferentes "de enorme relevancia" y que en principio se descarta que estén relacionadas, alrededor de 5.000 kilos de cocaína, lo que equivale a todo lo intervenido en 2011 por el Cuerpo Nacional de Policía.

Así una de ellas ha supuesto abortar el primer intento del clan mexicano de Sinaloa de entrar en España para acceder al mercado europeo. Aunque la cantidad que se incautó en el puerto de Valencia, 375 kilos, no era tan importante, sí lo ha sido por la importancia de eliminar esta intención de los mexicanos.


Otra operación importante es la que se está desarrollando casi de manera simultánea en Canarias. En esta caso, según Cosidó, "supone un golpe fuerte a las redes de narcotráfico implantadas en Venezuela". Así, en Las Palmas se han intervenido 1.588 kilogramos de cocaína de gran pureza que transportaba un avión privado que partió de Venezuela. El estupefaciente iba camuflado como supuesta ayuda humanitaria y su destino no era España, si bien fue desviado por la compañía a raíz de las sospechas que generó en su despegue. Actualmente están detenidos para prestarles declaración los tres tripulantes del avión.

Cosidó también avanzó que próximamente va a haber una cumbre de ministros del Interior de España, Francia, Portugal y Marruecos para poner en marcha un plan especial contra el tráfico de hachís.

http://www.diariodejerez.es/article/.../la/costa.html