Aquí me encuentro, cargado de cadenas, atado de pies y manos, mientras mis captores reclaman recompensa jamonera con rubia y refrescante cebada regada.

Pardiez que no encontrábame desaparecido sino de teclado alejado. Que de no poseer portátil me hallo culpable, tanto como víctima de este mes de agosto que me ha tenido de ordenador, móvil, y lo que es imperdonable, de sofá desposeído.

Vil verano, canallesco estío que me saca de mi madriguera al igual que al oso le separa de la osera la llegada de la primavera. Sólo le agradezco el apagón informativo, que ni prensa, radio ni televisión amárganme al menos esta esporádica parada en falso del planeta.

Pero, válgame Dios que tremendamente conmovido me siento, hasta la mismísima médula, por encontrarme en búsqueda y captura. Porque exista en la humanidad gente capaz de poseer tan mal gusto como para echarme en falta por estos andurriales. Ahora en serio, joeeeeerrrrrr, gracias por hacer que me sienta jodidamente cortao, que no hay cosa que me horrorice más que saberme leído, oído o considerado por encima del sonido de la hierba en crecimiento. sonroja2

Estimado Somewhere, en cuestiones de ajedrez hace ya no sé cuántos años que abandoné su práctica. En la actualidad suelo frecuentar ese que se juega en un tablero más extenso, uno que el amigo Trevelez conoce para bien o mal propio, y en el que los peones a veces le ponen unas zancadillas al rey de su propio color de agárrate y no te menees, así que no te digo ná de lo que pueden hacer los caballos, los alfiles y las torres.

Muchísimas gracias por el poema. Aquí te lo pongo con su musiquilla, que me trae el recuerdo del desaparecido Carlos Cano:
http://youtu.be/bvTPkYb5On0

Ummmmm, la Torre del Oro, esa hermana que siempre se ha llevado las miradas, los halagos, los cantares; y sin embargo, la otra, la Torre de la Plata, ha sido esa hermana que nacida en la misma época y de los mismos padres, y hasta unida a la del Oro por la piedra de sus murallas, ha debido sufrir todo tipo de ignominias, expolios, indiferencias, cambios y usos aberrantes, así como abandonos hasta nuestros días.

Bueno, que todavía no me he calentao y ya me ando enrrollando, cómo se nota la abstinencia. Gracias. xbridx